Comunicado de Prensa por la inseguridad en San Isidro

Posse, su plan de seguridad y las zonas liberadas

Es de conocimiento publico que los centros residenciales de San Isidro son una gran zona ‘liberada’. Desde hace un tiempo los trabajadores y vecinos del distrito asistimos, atónitos, observando como el intendente Posse monta un negociado –y una campaña política derechista- con nuestra seguridad.

La tragedia

El asesinato de Barrenechea, una victima más de estas zonas liberadas, es utilizada como una campaña política-mediática para reclamar más leyes represivas y regimentación policial.

Es mentira que por el retiro de la gendarmería de La Cava hoy lamentemos esta tragedia, porque durante los últimos 4 años los vecinos vimos como secuestran, matan y trafican drogas, antes y después de la gendarmería, antes y después de la bonaerense 2.

Sin embargo y con la excusa de la inseguridad, desde hace años La Cava está militarizada por Prefectura (antes) y Gendarmería (después y ahora nuevamente). Las razzias son frecuentes y violentas. Recorren los pasillos disparando a mansalva e incluso empleando gases.

En La Cava se denunciaron más de 50 casos de gatillo fácil en los últimos años. De esto no se habla.La inseguridad aumentó porque las grandes bandas de secuestradores y narcotraficantes que operan cuentan con la protección directa de uniformados y fiscales. O nos vamos a olvidar de Luis Orlando Peveri, el Jefe policial amigo de Posse, desplazado acusado de 'Coimas y Arreglos' para hacer desaparecer causas.Las empresas de seguridad privada montadas por comisarios y policías retirados, se instalaron en San Isidro más que en cualquier otro distrito. Cualquier duda, solo alcanza con recorrer las avenidas y principales arterias del municipio para observar sus oficinas, desde las cuales operan para toda la zona norte.

Posse y Macri ¿Coincidencias?

Posse se ha montado de la forma más perversa y demagógica sobre esta tragedia, impulsando una campaña derechista de regimentación y militarización de las calles (televisores, etc.) y de ataque a la juventud. Reclama la imputabilidad de los menores, una policía propia, más comisarias, más cárceles.

Una campaña a la que también se suman el gobernador Scioli y otros intendentes.El aparato represivo desplegado en las calles, no ha servido ni servirá para garantizar la seguridad del pueblo de San Isidro. Porque son ellos, los cómplices, garantes y protagonistas del crimen organizado en todos los ordenes (Secuestros, robos, trafico de drogas).

No se le puede pedir al lobo que cuide al gallinero.Es necesaria la deliberación en Asambleas Populares que coloque la seguridad bajo control de los trabajadores y vecinos, que disuelva los aparatos represivos que organizan el delito y de una respuesta que nos permita vivir tranquilos.

Las recetas de Posse son más de lo mismo.