El intendente de San Isidro, Gustavo Posse -ex radical K, ahora de nuevo en la UCR- se ha plantado como el cruzado de una "reforma del Estado y del sistema político" de claro carácter reaccionario, peor aún que la reforma proscriptiva nacional del kirchnerismo. Posse -que se candidatea para gobernador bonaerense en 2011- plantea su oposición a que se hagan elecciones cada dos años porque "genera desgaste y apatía en la ciudadanía". Postuló, en cambio, una especie de administración con "las ONG, las organizaciones intermedias, las iglesias y credos", una "democracia semidirecta", con "una red de cogestión" que ya funciona en San Isidro.
Pero no se limita sólo al plano político-electoral-institucional. Posse pretende avanzar hacia la "descentralización" y "municipalización". Ya la dictadura pasó las escuelas primarias de la nación a las provincias, y el menemismo hizo lo mismo con el secundario. Posse ofrece culminar esto con la "municipalización". En San Isidro, ¡el 75% de los colegios ya son privados!
El balance de la gestión de Posse en San Isidro es nefasto para los intereses populares: paraíso de los privatizadores en salud y educación; la urbanización de las villas (¡La Cava!) está completamente paralizada y rodeada de graves acusaciones de desfalcos y negociados. ¡Posse construyó un muro para separar a los pobres de los barrios ricos! Es paladín de todo tipo de reformas penales y jurídicas contra el pueblo explotado. Pero Posse no sólo es un derechista apoyado por el rabino Bergman y el obispo Casaretto. Tanto el ‘renovador' Ricardo Alfonsín, como el tándem Moreau-Storani, buscan su apoyo en la interna de la UCR boanerense de junio próximo.
Abajo las reformas políticas reaccionarias y proscriptivas. Libre presentación de los partidos políticos a las elecciones.
Pero no se limita sólo al plano político-electoral-institucional. Posse pretende avanzar hacia la "descentralización" y "municipalización". Ya la dictadura pasó las escuelas primarias de la nación a las provincias, y el menemismo hizo lo mismo con el secundario. Posse ofrece culminar esto con la "municipalización". En San Isidro, ¡el 75% de los colegios ya son privados!
El balance de la gestión de Posse en San Isidro es nefasto para los intereses populares: paraíso de los privatizadores en salud y educación; la urbanización de las villas (¡La Cava!) está completamente paralizada y rodeada de graves acusaciones de desfalcos y negociados. ¡Posse construyó un muro para separar a los pobres de los barrios ricos! Es paladín de todo tipo de reformas penales y jurídicas contra el pueblo explotado. Pero Posse no sólo es un derechista apoyado por el rabino Bergman y el obispo Casaretto. Tanto el ‘renovador' Ricardo Alfonsín, como el tándem Moreau-Storani, buscan su apoyo en la interna de la UCR boanerense de junio próximo.
Abajo las reformas políticas reaccionarias y proscriptivas. Libre presentación de los partidos políticos a las elecciones.
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